En este paraíso verdadero del sexo libre, donde el resaca sirve de contrapunto a los estertores de goce de las parejas, el encantador Priscila y sus amigas más encantadoras se entregan con pasión - cada una para su cuenta - a todos los juegos del amor y del sexo, sacando provecho(aprovechando) sin complejo de los deseos y del vigor de los chicos que les rodean. Así es como Ian, después de pasmoso exhibición de acrobacia sobre scooter marino, se entrega sin debilitarse a un muy diferente paseo a caballo que aprecia - sus gritos de placer dan fe a eso - insaciable Priscila. En una caleta a los accesos despedazados, agreable náyade, ebria de voluptuosidades que vienen, se introduce largamente hasta el fondo de la garganta(pechos), la vara sin embargo impresionante de su compañero antes de ofrecerle el estuche que palpita de su ano. Dos "huéspedes" a las pelucas extravagantes se entregan a caricias sabias y sáficas en preludio un triolisme de elección antes de prestarse, codo a codo, a las penetraciones sucesivas, el anverso y el reverso, de su invitado.
Duración: 85 minutos
Año: 2005